SALARIOS

El salario real sigue cayendo y ya perdió más del 6% con Milei

Los sueldos subieron menos que la inflación en abril y el poder adquisitivo sigue en retroceso. La pérdida viene desde 2016, pero se profundizó con el nuevo gobierno.

Mientras el gobierno de Javier Milei insiste con un relato de recuperación económica, los datos siguen desmintiendo ese discurso. En abril, los salarios registrados crecieron apenas un 2,4%, por debajo de la inflación del 2,8% informada por el INDEC. Y desde diciembre de 2023, cuando asumió la presidencia, los sueldos ya cayeron un 6,4% en términos reales.

El deterioro es más severo en el sector público: los trabajadores estatales vieron caer su salario un 15,5% desde el inicio del gobierno, mientras que en el sector privado registrado la pérdida fue del 1,8%.

Pero la baja del poder adquisitivo no comenzó con Milei. Según Luis Campos, investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, la caída de los salarios reales arrastra casi una década. Desde 2016, los sueldos del sector privado registrado perdieron un 18,6%, y los del sector público, un alarmante 34%. Lo que ocurre ahora es una aceleración aún más violenta de esa tendencia.

En abril, los aumentos salariales quedaron por debajo de la inflación tanto en el sector privado (2,5%) como en el público (2,3%). Y los trabajadores no registrados, que no entran en estas estadísticas, enfrentan una situación todavía más crítica.

En paralelo, el gobierno volvió a apuntar contra los empleados estatales. Esta semana se conoció una clase impartida por el presidente donde volvió a cargar contra ese sector, y también hubo un intento de eliminar el día no laborable por el Día del Trabajador Estatal.

El ajuste no solo se mide en puntos porcentuales: se ve en el supermercado, en la dificultad para llegar a fin de mes, y también en el uso del aguinaldo.

¿Qué pasó con el aguinaldo?

El aguinaldo de junio, que solía representar un respiro o una oportunidad de ahorro para los trabajadores, cambió completamente de función. Según un relevamiento de Focus Market, que encuestó a 7.000 personas en todo el país, uno de cada cuatro argentinos usó el medio aguinaldo para pagar deudas o solventar gastos corrientes.

El 31% lo destinó a cubrir gastos generales como expensas, servicios, colegios y medicina prepaga. Un 9% lo usó para saldar deudas, y un 2% se stockeó en el supermercado. La categoría de vacaciones también se redujo: del 15% que destinaba el aguinaldo al descanso en 2024, ahora lo hace apenas un 11%.

La comparación marca un giro profundo: el uso del aguinaldo para cubrir gastos básicos se disparó del 17 al 31%, mientras que la posibilidad de destinarlo al ahorro o a la compra de dólares bajó del 24 al 16%.

Como resumió Focus Market, “lo que antes era una oportunidad para proyectar, ahorrar, invertir o darse un gusto, hoy se convirtió en un salvavidas para sostener el ajuste financiero del gobierno”.

Salarios Caída del 6% Milei