JUSTICIA
El caso Dahse: más de 20 relatos de injusticia, silencios y una condena ratificada
El ginecólogo Alejandro Dahse fue condenado a 7 años e inhabilitación perpetua por abuso sexual. La sentencia, ratificada por el Superior Tribunal, expuso un patrón de violencias y la lenta respuesta judicial.
Por Tatiana Ledesma Flores
El 5 de octubre de 2023, tras una extensa jornada de alegatos, el Tribunal Oral Penal N° 1 condenó al ginecólogo Alejandro Gerardo Dahse a siete años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer la medicina por el abuso sexual de una paciente. Sin embargo, lo que quedó al descubierto va mucho más allá de una sentencia: el juicio exhibió las múltiples violencias que enfrentaron las sobrevivientes y la prensa que buscó narrar la verdad.
La primera denuncia fue presentada en 2021 por "Violeta" (nombre ficticio para resguardar su identidad). Su palabra, como ocurre con frecuencia, se encontró con el descreimiento social: ¿cómo el médico prestigioso, funcionario provincial, padre de familia, podría haber cometido tal delito? Pero el relato de "Violeta" abrió una cadena de testimonios. Primero apareció Carolina, que ya lo había denunciado en 2008. Luego, en febrero de 2022, se sumó la denuncia de Rebeca. Y de manera extraoficial, se accedió al relato de al menos 21 sobrevivientes más, que describen un modus operandi sistemático: Dahse se valía de la confianza médico-paciente para perpetrar abusos sexuales.
Fueron dos años de lucha para "Violeta" y para las demás mujeres que no pudieron denunciar a tiempo, ya sea por falta de acompañamiento familiar, recursos económicos o condiciones para acceder a la justicia. La querella estuvo a cargo de la abogada Sofía Domínguez, mientras que la defensa, encabezada por José María Arrieta e Isidoro Sassón —profesores de la Facultad de Derecho de la UNNE—, buscó sin éxito sostener la inocencia del acusado.
El proceso también dejó al descubierto las trabas del propio sistema judicial: la defensa presentó apelaciones constantes que dilataron el cumplimiento efectivo de la condena. Finalmente, hace dos semenas, el Superior Tribunal de Justicia de Corrientes ratificó la sentencia del Tribunal Oral Penal N° 1 mediante el fallo N° 198, al rechazar el recurso de casación interpuesto por los abogados de Dahse. Los ministros Luis Eduardo Rey Vázquez, Alejandro Alberto Chain y Fernando Augusto Niz coincidieron en confirmar lo resuelto en 2023.
La defensa aún tiene la posibilidad de presentar un recurso extraordinario federal en un plazo máximo de diez días. En caso de que sea rechazado, y aun cuando el expediente pudiera escalar hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Dahse debería comenzar a cumplir su condena de siete años y la inhabilitación perpetua de matrícula. Para las sobrevivientes, la decisión del STJ fue un bálsamo largamente esperado, aunque todavía teñido por la ansiedad de la cuenta regresiva: diez días que separan la espera de la certeza de justicia.
A todo esto se sumó un escenario hostil para la prensa. Durante el proceso judicial se impusieron restricciones inéditas a la cobertura fotográfica, y en un episodio grave, periodistas fueron gaseados de manera arbitraria al intentar registrar el inicio del juicio, quedando varios con secuelas.
Desde la denuncia de Violeta en 2021 hasta la ratificación de la condena en 2025 pasaron casi cuatro años. Cuatro años de espera, apelaciones y dilaciones que mantuvieron la sentencia en suspenso. Y si se toma en cuenta el antecedente de Carolina, que denunció en 2008 y nunca logró que su causa fuera reabierta, el contraste es aún más brutal: diecisiete años de impunidad para un patrón de abusos que recién ahora empieza a ser sancionado.
El caso Dahse expone así violencias entrelazadas: las sufridas por las víctimas en la intimidad de un consultorio y las ejercidas contra periodistas que intentaron contar la historia. La condena sienta un precedente judicial, pero también deja abierto un interrogante político y social: ¿cuánto pesa aún la palabra de las mujeres y cuánto se tolera el silenciamiento institucional cuando se trata de figuras de poder?.